El disco contiene doce temas, que más allá de lo técnico "suenan bien" Prolijidad por todos lados, buenas voces,buenos arreglos. Hay abundantes referencias folklóricas y en más de un momento se hace ineludible en el oído la presencia de Divididos de la época de "La era de la boludez" sobre todo en "Cien Rios" el quinto track del disco. Aquí y allá asoman algunas rudezas guitarreras - Rey Cebú, Los Puntuales - (que coincidentemente son dos de los temas que mas quedan en el oído).Los temas en general remiten al material de algunos cantautores de los 80's (Alejandro del Prado, incluso un Baglietto). Hay una delicada combinación entre elementos folklóricos y de pop rock, pero sin exabruptos rockeros, no hay temas acelerados ni nada de eso. Es un disco relajado que permite escuchar y disfrutar el trabajo de los músicos, las pequeñas sutilezas de los arreglos y la calidad de la producción.
Temas destacados: Rey Cebú, Los Puntuales, Girasoles (una letra volada que invita a viajar) y Quema, una pequeña joya en tono telúrico.
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